El masaje es la técnica terapéutica natural más antigua que ha usado el ser humano para eliminar el dolor. Una opción es masajear nuestros cuerpos para relajar los músculos y aliviar tensiones después de un día de estrés absoluto. Según un estudio publicado en “Science Translational Medicine”, los masajes alivian el dolor, promueven la recuperación rápida y reducen la inflamación de los músculos. Los masajes son, según este estudio, tan eficaces como los analgésicos.
Existen multitud de técnicas de masaje para cumplir diferentes objetivos: californiano, tailandés, shiatzu, reflexoterapia, estético, relajante, deportivo o erótico. El masaje es un placer que está en nuestras manos. Para llevarlo a cabo, además, no es necesario disponer ni de grandes infraestructuras, ni de conocimientos. Si queremos hacer un regalo único a esa persona que amamos, solamente hay una cosa que se hace imprescindible: ganas. Es el placer por el placer.
Necesidades y primeras nociones para dar un masaje
- Entorno y ambientación:
No está de más ser personas previsoras y tener a mano unas cuantas velas. La luz indirecta es ideal para crear una atmósfera relajante.Hay que poner atención también a la temperatura del espacio. La clave es que la persona que recibe el masaje no tenga sensación de frío. Así, sus músculos no estarán tensos.Y el ambiente… Una buena música es una herramienta muy interesante para que las sensaciones del masaje se multipliquen. Spotify tiene un millón de listas con música relajante para aprovechar.
- Materiales:
Como hemos dicho antes, lo bueno de triunfar con un masaje es que no necesitamos grandes alardes en cuanto a infraestructuras. Basta con disponer de unas toallas para tapar las zonas del cuerpo que no estemos masajeando en ese momento y un buen aceite de masaje.¿Qué os parece un buen consejo Terai para elegir el aceite ideal dentro de su gama de cosmética natural? El aceite de masaje Ohmm es una sinergia holística de aceites vegetales (albaricoque, almendras dulces) y extractos de plantas calmantes (caléndula). Es de muy fácil absorción. Además, es apto para veganos y está testado dermatológicamente en humanos. - Movimientos básicos:
Ya hemos comentado que no hace falta ser un experto o una experta masajeadora para conseguir regalar un rato agradable. Basta con tener claro un concepto: delicadeza.Comienza extendiendo una pequeña cantidad de aceite en tu mano y caliéntala para que el contraste con la piel sea el menor posible.A continuación, masajea con movimientos suaves pero firmes la zona del cuerpo que desees. Puedes hacerlo con amasamientos o simplemente con pases que consigan calentar los músculos.A medida que vamos calentando el músculo, vamos consiguiendo mayor relajación. Y con ello hacemos que esa persona especial vaya aliviando sus tensiones.
No existe un tiempo mínimo o máximo indicado para hacer masajes. Cada uno y cada una determinará cuánto tiempo dedica a esto. Y sobre todo, decidiréis cuándo os toca ser el masajista o el masajeado. En vuestras manos se encuentra el placer, disfrútalo.