La felicidad es vivir sin juzgar
Algo que hacemos constantemente. Desde que nos levantamos por la mañana decidimos si hace bueno o malo, ya estamos juzgando. Porque depende de nuestros parámetros, de nuestra forma de pensar. No es un hecho contrastable por todo el mundo. Para mi que haga calor puede ser una tortura y digo que vaya día… Para una persona cuando llueve puede ser un gran día… con lo que cuando algo siempre depende del sujeto que lo observa, hay juicio.
E incluso la temperatura, el viento podríamos considerarlos juicios porque es nuestra manera de medir. Desde la ciencia, desde esa perspectiva que es también otra manera de mirar, pero no vamos a ser tan profundas para este momento.
Ser feliz es disfrutar del momento presente
El momento presente es un hecho y vivir la experiencia de lo que acontece es algo que hemos perdido por el camino. Las niñas, los niños no juzgan… al menos al principio de su existencia. Luego ya nos encargamos las personas adultas de que entren en nuestro mismo juego, en nuestra manera de pensar, para justificarnos.
Sentirse plena es ese espacio en el que simplemente observamos
La felicidad es ese momento en el que únicamente estamos, vivimos lo que pasa, pase lo que esté pasando. Ese momento sin ninguna necesidad, de que sea diferente, más luminoso, más silencioso, más ruidoso, más cálido, más chispeante, más tranquilo, más movido… La felicidad es el momento tal y como es. En el preciso momento en que decidimos cambiarlo, ese momento deja de existir y desaparece.
Porque juzgamos que la vida no sea como es. Queremos cambiarla, modificarla, alterarla, en vez de aceptar que la vida es tal cual es. Si no te gusta, lo mejor que puedes hacer es cambiar tú, cambiar como la ves, como la juzgas, como la observas… El momento presente, la vida es perfecta tal y como es. Eres tú que decide, que se resiste, y como cambiar la vida no es posible, entramos en frustración, impotencia, depresión, rabia, etc…
Si quieres que la vida suceda tal y como tú quieres que suceda planifica, si quieres que te sorprenda, quítate del medio y confía
Los juicios hablan de nosotras y no de lo que juzgamos. Nos dicen la observadora que estamos siendo de eso que está pasando y que nada tiene que ver con la realidad, sino con nuestra configuración.
